El último concierto de Roxette en Ciudad del Cabo en 2016

  • El último concierto de Roxette en Ciudad del Cabo en 2016

    Sentada en una silla, vestida de blanco, corbata negra y con un bastón. Así fueron los conciertos finales de una mujer que quiso estar en un escenario a pesar de las dificultades

    Le diagnosticaron cáncer en 2002. Pasó por distintas fases, y cada una le dejó diferentes secuelas: sordera de un oído, problemas de visión e, incluso, pérdida de memoria. Sin embargo, Marie Fredriksson decidió seguir liderando Roxette hasta tres años antes de morir.

    Tal y como reconoció en su biografía Listen to my Heart, se consideraba una mujer resistente. Una actitud que probablemente tuviera desde sus ocho años, cuando su hermana Anna-Lisa falleció de un accidente de tráfico. Una tragedia que, sin duda, le marcó, pero que le hizo más fuerte ante los problemas que se le fueron presentando a lo largo de su vida.

    robablemente por ello decidiera seguir al pie del cañón hasta que su enfermedad ya le hizo imposible subir a un escenario. Su último concierto fue en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, el 8 de febrero de 2016. Muchos de sus fans han querido recordar su despedida de los escenarios en las redes sociales a modo de homenaje.

    Y es que la elegancia no la perdió en ningún momento. Pese a los intensos dolores que ya por entonces padecía, Fredriksson siguió micro en mano, vestida con una elegante chaqueta blanca, camisa del mismo color y corbata negra. Muchos lo vieron como un homenaje a David Bowie. Otros, simplemente vieron su buen gusto en su máximo esplendor.

     

    Le diagnosticaron cáncer en 2002. Pasó por distintas fases, y cada una le dejó diferentes secuelas: sordera de un oído, problemas de visión e, incluso, pérdida de memoria. Sin embargo, Marie Fredriksson decidió seguir liderando Roxette hasta tres años antes de morir.

    Tal y como reconoció en su biografía Listen to my Heart, se consideraba una mujer resistente. Una actitud que probablemente tuviera desde sus ocho años, cuando su hermana Anna-Lisa falleció de un accidente de tráfico. Una tragedia que, sin duda, le marcó, pero que le hizo más fuerte ante los problemas que se le fueron presentando a lo largo de su vida.

    Probablemente por ello decidiera seguir al pie del cañón hasta que su enfermedad ya le hizo imposible subir a un escenario. Su último concierto fue en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, el 8 de febrero de 2016. Muchos de sus fans han querido recordar su despedida de los escenarios en las redes sociales a modo de homenaje.

    Y es que la elegancia no la perdió en ningún momento. Pese a los intensos dolores que ya por entonces padecía, Fredriksson siguió micro en mano, vestida con una elegante chaqueta blanca, camisa del mismo color y corbata negra. Muchos lo vieron como un homenaje a David Bowie. Otros, simplemente vieron su buen gusto en su máximo esplendor.

    El bastón de metal no pasaba desapercibido, aunque no desentonaba con su look. Tampoco la silla en la que estaba sentada para poder aguantar todo el show. Un show que sacaba adelante gracias a su esplendorosa voz y que sus seguidores recordarán con nostalgia.