Marcha nacional contra el acuerdo con el FMI en Rosario

El 8 de febrero a las 17.30hs habrá una movilización en la ciudad que partirá de Plaza Sarmiento con dirección al Monumento a la Bandera, bajo  la consigna “Ni ajuste ni tarifazos. Abajo el acuerdo del gobierno con el FMI y el pago de la deuda externa”.  La misma será replicada en Plaza de Mayo y en numerosas localidades para rechazar el acuerdo del gobierno con el Fondo Monetario Internacional y la posible aprobación del mismo por el Congreso de la Nación.

Con la modalidad de reuniones abiertas, se vienen reuniendo en numerosas provincias del país sindicatos, organizaciones de desocupados, de derechos humanos, del movimiento de lucha ambiental y por los derechos de la mujer, así como partidos de izquierda, para debatir el problema de la deuda externa  y las consecuencias del acuerdo con el FMI al que arribó el gobierno argentino. El espacio caracteriza que el acuerdo traerá “una profundización de la pobreza, a partir del ajuste sobre salarios, jubilaciones y el gasto social” y “un mayor sometimiento nacional” por  la revisión trimestral sobre las cuentas del país que establece el acuerdo, por lo que llaman a movilizar “masivamente” para que no pase el acuerdo.

Carla Deiana, referente del Frente de Izquierda en Santa Fe expresó: “El acuerdo del gobierno con el FMI somete a la Argentina a un rumbo de ajuste insoportable, después de dos años de derrumbe de salarios y jubilaciones, que sirvió para cerrar el acuerdo, mientras se dejaba al 41% de la población en la pobreza. Para bajar los subsidios como reclama el Fondo se vienen los tarifazos a favor de las privatizadas, que no se pueden disimular con una segmentación, menos en las provincias donde se paga mucho más. La revisión trimestral del organismo sobre la economía es un mecanismo de extorsión para que se cumpla con las metas de devaluación, recorte del déficit fiscal y de asistencia monetaria del Banco Central al Tesoro, de lo contrario el FMI no hará los desembolsos y empujará el país al default. Esto establece una alteración política, porque semejante condicionamiento no es otra cosa que un cogobierno con el FMI.  Como denunciamos desde la izquierda, el gobierno no estaba desarrollando ninguna “negociación soberana” y se terminó reconociendo sin tapujos la deuda de 45 mil millones de dólares del macrismo, como se lo viene haciendo con el conjunto de una deuda usuraria e impagable, que ya equivale a un PBI. Desde el Frente de Izquierda, llamamos a una intervención política independiente de los trabajadores que tire abajo el acuerdo, porque esto no se resuelve con renunciamientos de funcionarios. Ponemos en debate nuestro programa alternativo al rumbo actual de decadencia,  que parte del salario igual a la canasta familiar, el 82% para las jubilaciones y un plan nacional de viviendas, a partir de recuperar el ahorro nacional con el no pago de la deuda externa, la nacionalización de la banca y el comercio exterior”.